lunes, 7 de enero de 2019

Trampa


Magritte-Disonancias

Mi destino lo trazaron manos ajenas 

Que siguen escribiendo sobre mis pasos. 

Quiero ir adelante pero ellas me llevan atrás,

Quiero retroceder y me empujan más allá, aún más allá.


Me doy cuenta que este poema es mi propia trampa 

porque aunque no quiera se escribe bajo su dictado.

Pero no me dictan versos de los dioses malditos,

no escucho a Baudelaire ni transcribo el barco ebrio.


Les pregunto si es Vallejo quien ya escribo 

mi muerte un jueves en París con aguacero. 

No contestan y me hacen escribir: MISTERIO. 


Me niego entonces a seguir escuchando

a estas musas de segunda 

pero mi libertad ya la compraron, 

esclava soy de estos malos versos