El viajero al irse dice volver.
Promesa falsa que se olvida del tiempo,
que engaña a la estúpida muerte
y al traicionero del olvido.
se acobija en el manto del misterio
Emprende viaje, traza un camino
y se encuentra enseguida con lo desconocido.
Su brújula persigue un latido incesante
que se escucha en cada paso:
El constante pulso del futuro errante.
Se entrega así por completo a la intriga,
sumergiéndose en el abismo de los
días.
Promesa falsa que se olvida del tiempo,
que engaña a la estúpida muerte
y al traicionero del olvido.
Dice adiós y en la partida
esconde ya el deseo del regreso.
esconde ya el deseo del regreso.
Dice adiós y a Dios le llega
el eco de un saludo y el grito de la duda
Ausencia y el abrazo de la despedida el eco de un saludo y el grito de la duda
se acobija en el manto del misterio
Emprende viaje, traza un camino
y se encuentra enseguida con lo desconocido.
Su brújula persigue un latido incesante
que se escucha en cada paso:
El constante pulso del futuro errante.
Se entrega así por completo a la intriga,
sumergiéndose en el abismo de los
días.